29 oct 2012

Coliseo


Título: Anfiteatro Flavio, más conocido como Coliseo.

Autor: Desconocido.

Estilo: Romano Imperial

Época: Finales del s. I d.C., en época de los Flavios, concretamente iniciado en época de Vespasiano (aprox. 70 d.C.)y terminado con Tito. Modificado por Domiciano.

Localización: Valle del Coliseo, Roma.



     Un anfiteatro es un edificio constituido por la unión de dos teatros, es una creación romana, y en concreto el coliseo por sus características fue el modelo para otros anfiteatros.

     Como en otras obras de ingenierías romanas, se combinaron distintos materiales como el hormigón, traventino, ladrillo, piedra de toba, mármol y estuco. La planta es ovalada  en el exterior destaca la fachada famosa por su acertada superposición de los tres órdenes de columnas sobre un pequeño estilóbato que sirve de base al edificio. No es el primer edificio en el que se superponen los órdenes, pero sí el más grandioso y mejor se conocerá y repetirá en siglos posteriores. Cada piso se plantea como una sucesión de arcos de medio punto sobre columnas de orden toscano, jónico y corintio que culminan en un entablamento.

     El cuarto piso, iniciado por el Emperador Tito y acabado por Domiciano para ampliar la capacidad del recinto, presenta un ático macizo y decorado por lacenas  estrechas fajas verticales corintias que enmarcan ventanas cuadradas. Se conservan unas 240 ménsulas de apoyo que sostenían los mástiles en los que se fija el toldo (velarium) que protegía al público del sol y la lluvia. Cuando se construyó el exterior estaba recubierto de estuco y los intercolumnios del segundo y tercer piso contenían esculturas; en el interior podemos ver un ejemplo del uso del arco en su máxima expresión como elemento sustentante ornamental y base de otros elementos: las bóvedas de cañón idealista.




     Los ochenta arcos de medio punto del piso inferior, son los acceso naturales a la gradería que no aprovecha un desnivel del terreno, sino que se levanta sobre una multitud de bóvedas superpuestas, de modo que el edificio está constituido por kilómetros de pasillos y galerías cubiertas de bóvedas de cañón y arista, estructuradas en pisos y comunicados por escaleras para garantizar el fluido de los cincuenta mil espectadores que podía albergar en sus ochenta filas de gradas.

     La gradería rodea la arena, el espacio oval central de 74 x 46 m donde se llevaban a cabo las celebraciones. Domiciano hizo construir bajo la arena, un subsuelo diseñado para agilizar el espectáculo que constaba de ingeniosos pasillos, escaleras y corredores abovedados y de una estudiada distribución de las estancias, ascensores de poleas para conducir a las fieras a la superficie y un sistema imperbializado de la conducción del agua para transformar la arena en una gran piscina de 1.5 m de profundidad para las naumaquias.

     La celebridad del coliseo va más allá de los valores del edificio en sí mismo. Pues fue la sede de la diversión en Roma y símbolo de la grandeza imperial. En el Coliseo se ofrecían espectáculos gratuitos de lucha entre gladiadores y fieras salvajes, específicamente de batallas históricas o mitológicas, naumaquias .. etc. El gusto por los espectáculos violentos era tal que habla de equipos de cazadores creados para traer fieras de Asia y África.

     El Coliseo se creó en el siglo I con los distintos emperadores de la dinastía Flavia. Era un momento de gran esplendor para el Imperio que estaba ya plenamente consolidado en la política, económica, social y cultural. Los emperadores de la época dominaban todo el mundo conocido y en su honor se crearon multitud de obras conmemorativas. Contaban también con el favor del pueblo. El coliseo se usó durante casi 500 años celebrándose los últimos juegos de la historias en el siglo XI. Deja de utilizarse en la alta Edad Media y a partir de entonces fue refugio, fábrica, sede de una orden religiosa, fortaleza y cantera. De sus ruinas se extrajo abundante material para la construcción de otros edificios hasta que su conversión en santuario cristiano detuvo el espolio y facilitó su conservación. Siempre ha sido un icono de la Roma imperial a pesar de su nivel de conservación pues se trata de una de las más destacados ejemplos de la arquitectura romana. Actualmente es uno de los edificios turísticos más atractivos de Roma y está muy ligado a la iglesia católica.

Kourós de Anavyssos


Autor: Desconocido

Cronología: 525 a.C.

Estilo: Griego Arcaico

Dimensiones: 1,94 metros.

Localización: Museo Nacional de Atenas.



     El Kouros de Anavyssos es una obra escultórica exenta, realizada en mármol. La escultura muestra un hombre de pie, desnudo y frontal, con los puños cerrados y prietos contra los muslos, y con la pierna izquierda adelantada como si quisiera avanzar, ojos almendrados y abultados, largos cabellos en forma de zig-zag que caen sobre los hombros y con labios arqueados con una expresión que se conoce como "sonrisa arcaica". Predominan los elementos geométricos en el tratamiento de la anatomía corporal, que se manifiesta en zonas como el cabello o la musculatura, que se disponen en torno a ejes, verticales y horizontales, que definen partes simétricas: brazos y piernas cilíndricos, tórax excesivamente abombado y abdomen muy reducido, por lo que parece desproporcionado.


     Es importante también destacar los convencionalismos a los que se somete la figura humana. Además de la geometrización anatómica, es importante el hieratismo, solo roto por la pierna adelantada, la simetría y la frontalidad, ya que es una obra pensada para ser vista de frente. Es una obra completamente estática, ya que no se consigue representar el movimiento, ni crear espacio alrededor de la estatua, que es un bloque de mármol. El tratamiento de la superficie es aún bastante rudo, aunque más avanzado que en obras anteriores, de manera que se va evolucionando no solo en el tratamiento de la anatomía masculina, sino también en el logro de las diferentes texturas: los cabellos, la piel...

     El término “kouros” se puede traducir como “atleta”, de modo que representaría a algún ganador de los Juegos Olímpicos de la antigua Grecia, aunque algunos especialistas han considerado durante mucho tiempo que se trataba de representaciones del dios Apolo. En cualquier caso, tiene función honorífica o conmemorativa, pues se trata de homenajear a los ganadores de los juegos.

     El “Kourós de Anavyssos” pertenece ya a la última etapa de de la época arcaica griega, de tal modo que tiene como antecedentes las “xoanas”, figuras votivas de la época oscura, y los primeros “kuroi”, como los hermanos “Cleobis y Britón”, en los que se aprecia un menor control de la técnica escultórica y menos capacidad en la representación de la figura humana. Sin embargo, el gusto por la representación del desnudo masculino continúa desarrollándose en la civilización griega mediante las esculturas de dioses y atletas, de manera que los principales escultores de la época clásica trabajarán la anatomía masculina, como Mirón (Discóbolo), Polícleto (Doríforo), Praxíteles (Hermes de Olimpia), Lisipo (Apoxiomeno), etc.

     Por otra parte, en el periodo arcaico se desarrollaron también esculturas femeninas, las “korai”, que serían el equivalente femenino a los “kuroi”; representan jóvenes doncellas, vestidas con peplo e himatión, con expresión y composición similar a las figuras masculinas, y con función votiva. 

Triada de Micerinos


Autor: Desconocido

Fecha: hacia 2530-2500 a.C. IV Dinastía. Imperio Antiguo.

Localización: Museo Egipcio. El Cairo (Egipto). Procede del templo funerario del faraón Micerinos, situado junto a su pirámide, en Gizeh.

Estilo: escultura del Imperio Antiguo egipcio.


     Se trata de un grupo escultórico realizado en un sólo bloque (formando una L vista desde perfil) donde encontramos unos personajes realizados de piedra en altorrelieve. Nos representa al faraón Micerinos acompañado de su esposa (a su derecha) y la diosa Hathor (diosa del cielo y la fertilidad). El faraón está representado con una barba postiza y la corona blanca perteneciente al Alto Egipcio, viste con un sencillo faldellín llamado shenti, el cual deja al descubierto el torso, brazos y piernas. Se encuentra en actitud de avanzar, para lo que adelanta su pierna izquierda, mientras su musculatura queda muy marcada. Las otras dos figuras femeninas que le acompañan (Hathor y su esposa) se agarran con una de sus manos más próximas al faraón y van vestidas con sencillas túnicas casi transparentes que dejan entrever diversos rasgos anatómicos y poseen melenas que caen por delante del cuello para llegar casi hasta los pechos. Por un lado, Hathor está representada con unos cuernos de vaca en la cabeza y entre ellos el disco sola. Ésta avanza levemente su pie izquierdo, en actitud de inicio de la marcha, la otra diosa se mantiene por completo estática, con los pies juntos. Por otro lado, la mujer de Micerinos, tiene sobre su cabeza un emblema característico, en el que se diferencia un chacal. 

     Este grupo escultórico presenta rasgos geométricos con gran rigidez e hieratismo. Al igual que la disposición de los brazos, pegados al cuerpo y los puños cerrados. Podemos decir que esta obra está realizada para ser vista de frente.

     Micerinos, cuyo reinado se sitúa a mediados del tercer milenio a.C., es el último de los grandes faraones de la IV Dinastía, que supone tanto la consolidación del Imperio Antiguo egipcio como el incremento del poder real en el país, del cual son prueba evidente las colosales pirámides de Gizeh, de dicha época, que nos muestran a los  monarcas egipcios como criaturas divinas con acceso a tan espectaculares tumbas para disfrutar de la eternidad.  

     Hubo ocho triadas de Micerinos que se encontraban en ocho capillas del llamado Templo del Valle, pero se conservan cuatro.

23 oct 2012

El escriba sentado


Autor: Desconocido.

Fecha: 2600-2500 a.C. IV Dinastía. (Otras dataciones atribuyen la escultura a la V Dinastía, entre 2480 y 2350 a.C. Restaurada en 1998.

Localización: Museo del Louvre, París (Francia). La escultura fue hallada en las excavaciones cercanas al Serapeum de Saqqara (Egipto).

Estilo: Escultura egipcia del Imperio Antiguo. IV-V Dinastías.


El escriba sentado es una escultura de bulto redondo que representa a un escriba de la época en forma sedente, con el torso erguido, con las piernas cruzadas, descalzo y vestido únicamente con un faldellín blanco en el que apoya el papiro en el cual está escribiendo. Muestra una incipiente obesidad que la observamos en los pliegues del torso, en anchura de las caderas y su escasa musculatura. El autor trabaja mucho la vivacidad de la mirada con el llamada "ojos almendrados" y conseguida con fragmentos de cristal de roca, las orejas son grandes y tiene los labios muy finos y apretados. Esto hace que sea una figura hierática y con escasa expresión en el rostro Está realizada con caliza policromada, destacan los tonos oscuros en el cabello y las pupilas y sobre todo, un tono anaranjado de su piel.


En cuanto a la composición de la obra se refiere, podemos apreciar una
clara disposición piramidal de la misma, con una base que estaría formada por

sus piernas, más anchas que el resto de la figura, un tronco constituido por su
torso y una cúspide formada por la cabeza.

La figura de los escribas es importante porque se nos acerca a la sociedad burocratizada y la función de estos era para dejar constancia de todo cuanto ocurría. Se conocen otras varias esculturas que representan escribas sentados, siendo la más destacada entre éstas la conservada en el Museo de El Cairo, realizada sobre granito y asignada a la época de la V Dinastía.

19 oct 2012

El Partenón


Autor: Ictinos y Calícrates, bajo la supervisión de Fidias.                           


Cronología: 447 - 432 a.C


Estilo: Griego Clásico



Localización: Acrópolis de Atenea, Grecia.



Dimensiones: 69,5 metros de largo, 31 de anchura y 10,93 de altura.



El Partenón es unos de los ejemplos más significativos del orden dórico, es octástilo, anfipróstilo y períptero, con 17 columnas en los lados mayores. Fue un templo muy novedoso porque introdujo importantes cambios como las correcciones ópticas y la disposición de 8x17 columnas. Todo el conjunto se asienta sobre una plataforma llamada Krepis formada por el estereóbato y estilóbato. Sobre el estilóbato se asientan las columnas que determinan el estilo. Son dóricas por lo que carecen de basa y el fuste está recorrido longitudinalmente por estrías vivas. El capitel se une a la columna mediante el collarino y está formado por dos molduras que se llaman equino y ábaco. Predomina por tanto, las líneas rectas y los volúmenes geométricos. las columnas dóricas se caracterizan por un leve ensanchamiento del fuste en su parte central. El éntasis es para evitar la sensación de fragilidad. Además todo el conjunto carece de líneas rectas. El estilóbato y el entablamento se curvan ligeramente hacia arriba para evitar que parezcan hundidos. Las columnas están inclinadas hacia el interior, los intercolumnios son de distinta longitud para que parezcan iguales y las columnas de los ángulos son más gruesas porque reciben más luza.

Por encima de los capiteles se encuentra el entablamento dividido en tres partes: arquitrabe liso, friso dividido en triglifos y metopas y una cornisa saliente. El empleo de la cubierta a dos aguas genera en los lados menores un amplio espacio triangular. El tímpano con decoración escultórica que queda enmarcado por el frontón.

En planta, tras la fachada octástila se accede a un segundo córtico, llamado pronaos, que da paso a la naos o cella aislada del resto del edificio mediante un muro de sillares.

En la parte trasera del templo, otro pórtico, da paso al opistodomo, una sala menor para custodiar el tesoro del templo y los objetos para el culto de la diosa en la que cuatro columnas jónicas sostenían la cubierta.
Todo el conjunto iba policromado con colores vivos sobre todo rojos, azules y dorados, pero no se conserva la policromía.

El templo simboliza el poder de Atenea, así como su consideración de divinidad protectora de Atenas. La simbología escultórica del partenón se hacía evidente mediante la decoración que presentaba el edificio en los frontones del templo estaban los temas del nacimiento de Atenea y del patronato de ática, es decir, la lucha entre atenea y Poseidón por el control de la polis. Por otra parte, en las metopas se representa cuatro temas diferentes: en los dos lados menores, con 14 metopas cada uno, aparecen la amarenomatia y la gigantomaquia. En los lados mayores con 33 metopas en cada uno, se representa la centauromaquia. Todo el conjunto simboliza la capacidad de Atenas para vencer a sus enemigos.

El partenón se edificó durante la llamada época clásica plena. Que se inicia tras la victoria griega en las guerras médicas. Durante este conflicto el rey saqueó y destronó la ciudad de Atenas, que fue reconstruida durante el gobierno de Pericles. En esta época se consolida la democracia ateniense y la ciudad vive sus años de mayor esplendor, paz y prosperidad.

En la acrópolis de Atenas hay otros elementos como: Propileos, entrada triunfal a la acrópolis construida de mármol pentélico; el templo de Atenea Nike, junto al propileos y es uno de los primeros ejemplos del orden jónico, las columnas se asientan sobre la krepis de tres escalones, tienen basa, fuste esbelto con acanaladuras y capitel con volutas, el friso está decorado y la cornisa da paso al frontón y al tímpano, que no se conservan. Es un templo tetrástilo y anfipróstilo. El Erecteion es un templo dedicado a dioses como Atenea y Poseidón y a héroes como Cécrope y Erecteo, construido por Menesibles. Es muy irregular, por la compleja orografía pero es equilibrado, armónico y proporcional. Tiene cuatro pórticos pero destaca el que está al sur, de orden jónico y conocido como tribuna de las cariátides porque en lugar de fustes hay esculturas de mujeres vestidas con peplo, trabajadas con la técnica de “paños mojados” con la cual se consigue que las vestiduras se adhieran al cuerpo transparentado la anatomía de la mujer.

9 oct 2012

Las Pirámides de Gizeh





Se trata de Las pirámides de Gizeh, localidad cercana a El Cairo, que forman parte de la necrópolis. Estas tres pirámides pertenecen a la última etapa en la que se alcanza un grado máximo de perfección en la construcción de estos edificios tras un periodo de pruebas que se inició en torno al 2700 con la construcción de la pirámide escalonada en el complejo funerario de Saqqara. Además de piedra granítica, se utilizó caliza transportada desde distintos yacimientos de Sur a Norte de Egipto a través del Nilo. Son obras macizas en las que predomina el muro sobre el vano, pues carecen de aberturas al igual, también carecen de elementos decorativos (podríamos considerar como tal la cubierta de caliza pulimentada que áun es visible en una de ellas).


La planta de las tres pirámides es cuadrada, aunque de distintos tamaños y las tres tienen la misma orientación. Junto a ellas aparecen multitud de construcciones, ya que son conjunto funerario que se extiende a lo largo de 150 km. Las pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos (padre, hijo y nieto) pertenecen a la IV dinastía. Están acompañadas de otras pirámides más pequeñas construidas de tres en tres para el enterramiento de las reinas. Hay también gran número de mastabas y templos funerarios. Vemos el exterior de estas grandes construcciones de sentido funerario y religioso, realizadas con piedra trabajada regularmente en sillares rectangulares.






     La pirámide de Keops es la más espectacular, situada en el enclave de datos geográficos, matemáticos y astronómicos precisos. Se orienta hacia los puntos cardinales y tiene 146 m de alto y más de 200 m de largo. Sufrió saqueos en el primer período intermedio pues sirvió de cantera para otros edificios. Tiene forma piramidal formada por sillares gigantescos y de hileras inclinadas hacia el centro. En el interior tiene tres cámaras sepulcrales de tres partes sucesivas: la primera excavada en una roca y con acceso a través de una rampa, se abandonó para construir la segunda, la llamada cámara de la reina. Finalmente se construyó la tercera en el centro de la pirámide a la que se accede por un corredor descendente. Tiene galerías que comunican con el exterior y la puerta en el lado norte que se cerraba con losas de piedra.

La pirámide de Kefrén es de menor altura pero de mayor superficie por lo que su ángulo de inclinación es mayor, conserva parte del revestimiento calizo en la cúspide y tiene una sola cámara sepulcral a ras del suelo y alineada en el eje vertical de la pirámide. Es más maciza que la de keops y tiene varios templos junto a ella.







La pirámide de Micerinos es de tamaño  muy inferior a las otras y se conserva en peor estado. Tiene una sola cámara sepulcral excavada en la roca y templos funerarios anexos.



La esfinge completa el conjunto funerario de Gizeh y servía para la vigilancia y protección de todo el valle. Parece ser una representación del faraón Kefrén deificado y se representa como un híbrido con cuerpo de león y cabeza humana. En la cabeza lleva el nemes o velo rígido que da aspecto triangular a la cabeza y formaba parte del atuendo real del faraón. El uraeus es la cobra sagrada asociada al faraón, que va sobre la frente. La esfinge tiene 60 m de largo y 20 m de alto y entre las patas delanteras había un templo que se encuentra muy deteriorado.

El conjunto de Gizeh es una de las principales edificaciones del Imperio antiguo Egipcio y está considerado en la antigüedad como una de las Siete maravillas del mundo, y es la única de las siete que aún perdura. Los faraones Keops, Kefrén y Micerinos pertenecieron a la IV dinastía. Este conjunto es un claro ejemplo de la arquitectura de la época, caracterizadas por las formas macizas y geométricas, el papel destacado del muro como único elemento sustentante, la robustez,  el colosalismo de los exteriores frente a los interiores oscuros. Es un conjunto monumental funerario destinado a ser hogar de eterno descanso de los muertos. Además muestra la jerarquizada sociedad egipcia en la que el faraón, de naturaleza divina, está por encima de las personas. El conjunto destaca también por su simbología, pues se erigió siguiendo complejos cálculos matemáticos y astronómicos.



8 oct 2012

El Discóbolo de Mirón


Autor: Mirón

Cronología: 460-450 a.C


Estilo: Griego Clásico



Técnica: Trabajado en bronce aunque no nos han llegado las originales, esta es una copia romana realizada en mármol.


Dimensiones: 1.55 metros de altura







     Se trata de una escultura exenta con una posición inclinada, figura masculina desnuda y abierta. El atleta se concentra en lanzar el disco, logrando así, gran dinamismo al extender un brazo hacia atrás. Destaca la postura del contraposto, es decir, la oposición rítmica de las partes del cuerpo simétricas de modo que mientras una parece que se mantiene rígida, la otra parte permanece relajada. Podemos observar que hay sensación de movimiento debido a la postura que tiene la figura. Dicho movimiento lo generan dos arcos imaginarios: uno va desde los hombros hasta el pie que está levantado y el otro está determinado por la línea de la espalda y se extiende hasta el otro pies. Además subraya ese movimiento contenido creando una línea en zig-zag desde el disco hasta el pie, pasando por la cabeza, la espalda, la cadera y la rodilla. Sin embargo, la cabeza y el rostro son mucho mas arcaicos, ya que en la cabeza predomina la forma geométrica y el rostro es sereno pero vacío de sentimientos y no responde al esfuerzo que refleja el resto del cuerpo. Podemos decir que sigue predominando el punto de vista frontal, pero la estatua ya no es un bloque macizo, sino que se extiende en el espacio ganando otros puntos de vista.


      La época clásica griega se extiende entre los siglos V y IV a.C, entre el final de las Guerras Médicas y el Principio de la Guerra de Peloponeso. Mirón es uno de los primeros representantes del clasicismo por lo que en su obra se mantienen algunos rasgos arcaicos como la inexpresibilidad de los rostros pero avanza ya que alguno de los elementos que desarrollaran Fidias, Polícreto y otros escultores en el período clásico pleno. Algunos de estos elementos son el contraposto, el perfeccionamiento de la anatomía humana y el estudio del movimiento. En esta época Mirón pone en manifiesto la búsqueda de el ideal de perfección y la belleza clásica, ya que la cultura clásica griega estuvo determinada por el antropocentrismo.



      Esta obra la podemos relacionar con otras obras de otros escultores que también representan atletas, por ejemplo el "Doríforo" de Porícleto o el "Apoxiomeno" de Lisipo.